Otra vez sopa

Argentino de Rosario cayó derrotado hoy ante Ituzaingo por 2 a 0 en la zona oeste del Gran Buenos Aires, en un partido pendiente de la 28° fecha del campeonato de Primera D. Los goles del local fueron marcados por Fabricio Vicario y Agustín Dallera, ambos en la segunda mitad. El Salaito acumula 8 partidos sin ganar, y se encuentra en el fondo de la tabla de posiciones.

Los dirigidos por Sergio Barbieri llegaban a este choque con la misión de reivindicar la buena imagen dejada el pasado sábado ante Fénix, en donde demostraron ser superiores al puntero del campeonato. Esto, sumado al pobre nivel exhibido por su rival de turno en la presente temporada, hacía esperanzar al hincha salaito con la idea de obtener los tres puntos de su incursión a Ituzaingo.

Igualmente, el trámite del partido se presentó complicado desde el principio, ya que durante la primera mitad el Verde se plantó y logró ralentizar el juego ofensivo del visitante. Y hasta de momentos pudo inquietar a la defensa de Argentino. Por eso el conformismo de ambos equipos al término del primer tiempo, ya que Ituzaingo plasmaba su plan de juego y el Sala, en un contexto hostil, lograba mantener el cero en su arco. Pero para la segunda parte, ocurrió lo de siempre. Vicario ni bien empezada la complementaria, y Dallera al minuto 15´ se aprovecharon de la debilidad anímica del plantel visitante, que en lo que va de la temporada nunca ha sabido pegar el grito en el cielo en los momentos de adversidad.

Así, Argentino perdió su tercer partido de manera consecutiva, acumulando además 8 cotejos sin conocer la victoria. La última vez que se llevó los tres puntos fue hace dos meses, cuando derrotó a Deportivo Paraguayo en el Olaeta. Y la frutilla del postre: hace desde agosto del pasado año que no gana en condición de visitante (1-0 a Lugano en la fecha inaugural).

Todos estos datos no hacen más que reflejar que la institución de Sorrento se encuentra en el peor momento de su historia, agonizando en la última categoría del fútbol argentino. Y paradójicamente, en el año en cual cumple cien años de vida. Ojalá que esta temporada se termine lo antes posible, y que en base al trabajo de todas las partes (comisión directiva, cuerpo técnico y jugadores), el club vuelva al lugar que se merece.